y la hice una sóla persona, la puse frente a mí en el espejo,
la miré y la hallé parecida a mis sueños,
así comprobé que algo que no era yo me cortaba las alas,
tenía mi rostro y poseía mis gestos:
nadie que no fuese yo podría haber sabido que no era yo.
sentí el miedo originario, no a lo desconocido
sino a lo que conocemos y no estamos dispuestos a enfrentar,
tenía mi forma, en todo igual a mí pero sin serlo.
me armé en una lucha en su contra,
quize destruirlo siendo mi gemelo
y no pude...
supe porque el instinto es feroz
y es único ante la fosa abisal
que mis errores serían los suyos
y le ataqué atacándome
lo herí hiriéndome
lo amé amándome...
y como al hacerlo dejé de verlo
aprendí que lo eliminaba eliminándome
y que quedando repetido en la oscilación de un filamento en el vacío
mi pregunta tendría lugar a su respuesta
y que pasase lo que pasase
el tiempo y sus posibilidades absurdas
siempre iría a recibir por respuesta
que difuso como la luz sobre las aguas eternas
la respuesta posible está inscrita en las cosas como promesa