jueves, 28 de junio de 2007

Las habladurías del mundo

A Spinetta y otra persona que sabe
siempre que es ella a la que me dirijo.


La vida se manifiesta a cada persona de modo diferente, obvio. Siempre lo escuchamos, y decimos, pero parecemos no entenderlo. Por lo menos acepto que me es difícil asumir que otros puedan caminar sin sentir confusión, seguros, tranquilos y alegres todo el tiempo.
Alegres no en el sentido de que yo sea un exagera tristezas y me lo pase gimiendo como si la vida fuese una tragedia o teleseria mexicana. No señores, me refiero a que siempre me detengo en las cosas nimias, en aquellas torpezas que me hacen sentir como flotando en el espacio.
Por suerte existen personas que nos aterrizan, que con sus palabras libres de retórica, magestuosidad o profundidad/superflua nos hacen entender en una sensación la vida y en un segundo como una intrascendente iluminación. Son esas personas finalmente las que marcan y significan algo en nuestras vidas, a las que le debemos tanto o todas las cosas.
"Hay golpes en la vida tan fuertes... yo no sé" decía Vallejo y creo lo mismo con convicción, la vida me ha llevado a cosas insospechadas, no reniego de ninguna de ellas, el Alcohol fue por largo tiempo un compañero para mí, el más fiel compañero de los pobres...aquellos que hemos sentido la más plena soledad hemos conocido lo que es el alcohol. La melancolia me recuerda algunas mañanas de otoño que somos polvo, que "nada hay de nuevo bajo el sol". Y eso me hace hoy feliz, ¿por qué no? saber que seré polvo y volveré a la tierra, que todo lo que hacemos está, estuvo, estará desde siempre. Que nuestro Dios nos guarda un lugar en el vientre de la Tierramadre, que el amor perdurará en las cenizas que seremos.
Suelo contradecirme y es algo propio en mí, esto no es un poema, no es nada más que la más honesta muestra de lo que soy. "Con nuestra ardiente paciencia entraremos en las espléndidas ciudades", sumaría yo pues la FE, y yo tengo la Fe de que entraré en las espléndidas ciudades, y no sólo sino con quien más amo (sabes tu que esto es para ti). La vida me ha hecho así, así cómo. bueno así un poco extraño, pero amable y confiado en que algún día cercano todos aquellos que hemos sufrido seremos libres y felices. Más felices de lo que somos, pues de serlo lo soy.
Las habladurías del mundo no pueden atraparme dice Spinetta, cierto...debo aprender de él y saber que todo estará superado para mí cuando puede sentir realmente que todo lo cruel que fue para mí el vivir quede atrás, cuando sienta todo mi ser renacer para vivir otra vez desde la más pura infancia. Todo eso lo tendré pronto, mientras a cada amanecer sepa que tu corazón está junto al mio.

martes, 26 de junio de 2007

Todo lo que fueras

*cierta vez dijo Pablo Picasso que el gran tema de la pintura fue/es y/será el cuerpo Humano, y por qué no decirlo, el cuerpo de la mujer. Hoy, despues de 5 años de intensa escritura creo con certeza en sus palabras, y despues de haber escrito de todas las formas que me fue posible, de tocar todos los temas que me fue posible, desde el más profundo abandono, desde la melancolía más primogenia que me constituye por los huesos, desde la desesperanza, la pérdida, el fracaso, hoy, vuelvo a decirlo, adhiero a sus palabras y me alejo de la ampulosidad de la "nueva poesía": todo aquello que quiere sorprender, que quiere maravillar...dejar en evidencia las habilidades. Pues yo no hago más que como las hormigas construir rama por rama lo que ha significado la Poesía para mí, y ofrendo con humildad pero jamás deshonra todo lo que soy, todo lo que escribo a una MUJER, porque son ellas, queridos amigos míos, quienes transforman el alma y la mente, y porque son ellas finalmente la más bella y prístina poesía*

26/06/2007 Juan Carlos Vergara

Amor mío, si yo pudiera, si yo pudiera ser un cinturón de polvo celeste,

granizo de estalactitas, ser un pajarito y anidar y acurrucarme, pequeñito y sólo
en tu ombligo; tiritar de frío allí con el oido arrimado en tu piel. Sería todo el amor,
sería toda la sangre de Dios que baja enorme/libre/única y voraz, como una
misma contracción una misma dilatación: santa furia que clama tu nombre en los volcanes
que cae hecha pedazos en la tormenta. En la nieve misma yo sería todo el dulce
amor para cubrir el llano inmenso, infinito tu vientre tus piernas tus pechos
tus ojos: ese bosque inmensamente azul que cae en tus ojos. De rodillas como
Pablo en el camino de Damasco,
tan sorprendido
como el profeta ante el arbusto en llamas que es tu corazón en noches como estas.
Sólo ahí ardiendo. Y yo clamando nada más que por un segundo contigo:
abrasarme entero en la llama y así conocer
en tu cuerpo la eternidad.

sábado, 23 de junio de 2007

Alas de polilla


El yo es un ser abstracto,
Dúctil, inestable como el vapor de la tetera que es pero
Que nos parece dejará de ser en
Cualquier momento.

No se puede hablar
De él; su existencia es más bien una
Ilusión fantasmagórica, como un espectro
Parpadeante que se ve y luego desaparece;
El yo es una palabra muerta
Y no posee ningún significado más que el
Simple sonido. Quizá logre éste existir (el yo), sin embargo
Es tan inconsistente -al igual que las alas de las polillas-
que es lo mismo
que no existiera.

viernes, 15 de junio de 2007

Torpe forma de manifestar un amor no muy prudente

No soy muy bueno con esto bueno con esto de las palabras
con las palabras de amor como si al amor algo le incumbieran las palabras
ese es el punto el dilema el gran dilema diría el sabio que cosa tienen
que ver las palabras y el amor en lo concreto que tienen
que ver las palabras con tus ojos o con tu boca con tu boca nada
porque tu boca no es para las palabras ninguna boca es para las palabras
-torpemente la mía- pero la tuya mucho menos jamás ha conocido palabra alguna
conoce los latidos conoce el contacto de otros dos labios bellamente limpios
nada tienen que ver las palabras con tus orejitas ni con tus pies ni menos
mucho menos con tus pechos entre ellos yo puse un nido y ahí un pajarito
para que esté siempre muy cerca de tu corazón para que lo oiga para que aprenda
a cantar como él y así vuele libre un día libre libre y cante como tu corazón
canta y tu sigas ahí mirándome como sólo tu miras porque tú los ojos
no los tienes para mirar los tienes como dos infinitos
espejos para que toda la hermosura sea en ellos otra vez hermosura
para que nunca se sacie todo de ser una y otra vez y lo que es sea nuevamente
y lo que no es acaso en un fugaz arranque de tu loca imaginación sea salga volando
salga por tu pecho por el nidito ese que yo te dejé sea y salga volando
lo que es lo que no es en dos plataformas está espera descansa se proyecta
no hay nada con decir estas cosas tu no las entiendes no es que no las puedas
entender es que no te pertenece la boca sucia mía llena de palabras de
significados torpes llena de vicios de lamentaciones eres de esas que
habló hace tanto tiempo de esas que supo que de nada valía
que callaste que hace tanto tiempo tanto tanto pero tanto tiempo
dejaste de hacerlo que no lo recuerdas nada recuerdas de esas cosas
de esas sucias torpes graciosas cosas entraste como los animales las
piedras o las plantas en el silencio eterno de mirar de mirar para reflejar todo
una y otra vez de mirar con la mirada vacía de estar simplemente así
nada tienen que ver las palabras contigo nada tienen que ver mis palabras contigo
tan lejos estás de todo eso tan cerca estas de los tallos de los segundos de
mis manos y mis manos saben mejor tu nombre que mi boca lo aprendieron entre
tus sostenes y tus calzones entre tus pechos y entre la cólera inmensa
de tu clítoris entre tus axilas y tus rodillas tu nombre allí volcado
derramado en tu pubis en tu frente en tus codos mis manos lo aprendieron
pero sólo tu sabes el lenguaje de mis manos el mismo lenguaje de ese pajarito
que anida en tu pecho ese pajarito es mi corazón el
mío que hace ya tanto tiempo dejó de ser el mío y no es más que una
pequeña continuación de lo que conserva el tuyo acaso sea solo un movimiento
más un pequeño latido más un soplido más
no mucho pero algo más algo quizá que no necesitara de mis palabras
y para no necesitarlo lo saqué de mí lo deposité en ti
para que aunque poco fuera algo de mí conociera eso que tu también
conoces eso que el color de tus labios me parece que mi boca lo traduce
por libertad aunque todo acercamiento de mi boca a tus cosas es imprudente
inexacto ineficaz todo lo tuyo está reservado al secreto de los besos de las
manos de los silencios madre padre origen fundamento de tus pasos
y yo siempre soy acaso lo mismo el que para acercarse a ti debe saber perder
la cabeza porque para amarte a ti no basta con hacerlo.

martes, 12 de junio de 2007

Tanto Borges


Borges era tan grande era tan sabio
Tan libérrimo en el laberinto de sus pensamientos:
(tigre tijereteado con el ropaje de un trapecista)
que dios lo abrumaba, el tiempo, la eternidad, lo abrumaban; y a mí…

a mi me abruman
mis zapatos
mis uñas
una caja de aspirinas
el examen a la próstata
un trozo de servilleta
un miércoles de junio,
eso me abruma.

sábado, 9 de junio de 2007

Si me dejas de gustar me seguirías gustando,
Es como cuando no quieres fumar y sigues fumando
-y sé que no sabes de qué estoy hablando-
no me ha pasado, pero supongo que así sería
reconociendo de ante mano que siempre supongo mal
(pero intuyo bien) supongo que si me dejaras
de gustar me seguirías gustando,
porque cuando sienta que no me gustas
es porque aún algo me gustas,
tendría, para que no me gustases, que sentir
esa indiferencia enorme, esa de no sentir nada
y cuando sienta que no me gustas estoy aún ahí
sintiendo algo. Cuando no me gustes
no me percataré, no me daré cuenta cuando deje
de hacerlo (de quererte)
estaré sentado en la taza, almorzando garbanzos
comprando el diario o
comiendo
cabri-
tas.

lunes, 4 de junio de 2007

Toda la inmanencia es tu figura

**amor, acaso sea esto una pequeña manifestación, un acta/monólogo de un sinrazón enamorado, la más honesta de las formas de abandonarme al sendero de la libertad que significa el "todopoderoso Amor(1)**
1.Hölderlin

Desde esta orilla yo te concibo
Te concibo completa acaso completa durmiente
Prístina, amapola.
Estallido de olas, allí voy yo lento entrando lento
Entre las rocas para besarte acaso, Oh sagrada
Entre los hombres,
La punta de los pies.
Subo por ti, espesa noche espesa
Soy una lluvia de tallos
Y raíces, subo noche espesa
Espesa noche espesa.
Heme aquí, mírame yo me rajo
El pecho mírame, el pechos con las
Manos así taladros. Con las uñas
Hambrientas de tu nombre, mírame
Y tomo el corazón latiendo aún, preconizando
El devastador círculo de las voces
Y los ojos que tu cuerpo calla
Y juro, Oh magnífica aparición terrestre
Que si te dejase de amar
Todo el fuego, si te dejase
Todo, si te dejase todo
Todo, todo
Todo, todo, todo
Si te dejase, aparición celeste
Todo el fuego sería poco para quemarme
Maldito hasta el hartazgo en el infierno,
Para consumirme hasta desaparecer bastardo en el ripio
Sean las hojas, estas hojas, estas
Los testigos de mi juramento
Que yo desde esta orilla te concibo, amapola
Y en lo súbito del vértigo,
En lo que crece en mí
Como un destello púrpura
Una explosión aniquilantemente
Vertical, amapola
Sino diosa a lo menos
Gracia única entre
la distancia de mis soledades,
en la punta del Aqueronte
subo yo a ti trepo subo a ti
espesa noche espesa
me niego el derecho a las
ofrendas o el descanso te rodeo los
tobillos como una madreselva
me hago todo una sola y
azul tempestad de voces
para que el pretérito el futuro y el presente y
el pétalo
el fuego la rosa y la espina escuchen,
el fuego la rosa y
la espina escuchen
espesa noche espesa
que desde mis huesos temblando de
miedo ante ti, Magnífica Inmortal
bestia sagrada, Magnífica escuchen
espesa noche espesa Inmortal escuchen el
fuego la rosa y la espina
escuchen vástago de corazones que llevo
en los ojos espesa
noche espesa
desde mis huesos
rotos Magnífica
desde mis huesos
mírame Inmortal
mírame fuego rosa espina
mírame desde mi huesos yo
clamo, te arrebato con furia de
mil centauros o perros ratas
escarabajos o mariposas clamo desde
mis huesos clamo, desde mis huesos
para desde hoy, al amanecer nuevo
a las alboradas, y a tus respiros
yo pertenezca
a tu presencia. Oscuramente intraspasable
fruta compacta,
sea,
dichoso hasta
que me estrangulen mis ojos,
sólo tu sístole, para saber que
tras la distancia de los abismos
me citas me recuerdas y me posees
desde tus tormentas de sangre hirviente,
espesa noche espesa
en tus diástoles,
o en tu vuelo errante
de estrellas mariposas
o papeles.